A nivel mundial, el comercio ilegal de vida silvestre tiene un valor estimado de 23 mil millones de dólares al año, según el PNUMA y la Interpol, y gran parte de él está dirigido por el crimen organizado. La región de Latinoamérica y el Caribe está experimentando un aumento notable del crimen organizado, incluida la recolección y el comercio ilegal de vida silvestre, partes de la vida silvestre y productos derivados de la vida silvestre, amenazando a jaguares, tiburones, peces como la totoaba, loros, tortugas, monos, cactus, palmeras, tarántulas y cientos de otras especies (IPBES 2019, IUCN 2021).
Los delitos contra la vida silvestre también son un problema de desarrollo, ya que socavan el estado de derecho, fomenta la corrupción y los abusos contra los derechos humanos, expone al público a nuevas enfermedades zoonóticas y socava la seguridad alimentaria y social.
Este documento resume las acciones que se están llevando a cabo para desarrollar la primera etapa del Centro para Combatir los Delitos contra la Vida Silvestre de Latinoamérica y el Caribe, incluyendo la recopilación de información de referencia dentro de la región, el establecimiento de temas prioritarios, el mapeo de las brechas de capacidades y el desarrollo de un plan de acción de dos años.
Los delitos contra la vida silvestre también son un problema de desarrollo, ya que socavan el estado de derecho, fomenta la corrupción y los abusos contra los derechos humanos, expone al público a nuevas enfermedades zoonóticas y socava la seguridad alimentaria y social.
Este documento resume las acciones que se están llevando a cabo para desarrollar la primera etapa del Centro para Combatir los Delitos contra la Vida Silvestre de Latinoamérica y el Caribe, incluyendo la recopilación de información de referencia dentro de la región, el establecimiento de temas prioritarios, el mapeo de las brechas de capacidades y el desarrollo de un plan de acción de dos años.