Los guardianes zapotecos del bosque

Posted on octubre, 21 2021

Conoce las historias de tres emprendimientos sociales sostenibles en Oaxaca.

Las cuencas Copalita-Zimatan-Huatulco (CZH) se encuentran al sur del estado de Oaxaca, México. La CZH está formada por manglares y corales en el sur, y por sinuosas colinas de bosques de pino-encino en el norte, sobre las cuales vuelan especies endémicas de aves como el reyezuelo de Sinaloa (Thryothorus sinaloa) y el carpintero de mejillas doradas (Melanerpes chrysogenys).


En la parte alta, rodeada por esta biodiversidad, se encuentra el municipio de San Miguel Suchixtepec, una comunidad de aproximadamente 3.000 habitantes. Los habitantes de San Miguel son, en su mayoría, de etnia zapoteca; un grupo indígena que, junto con los chontales pre-mayas, tiene una presencia en la región que se remonta a 15.000 años.

Lamentablemente, este paisaje con gran importancia natural y cultural sufre una deforestación causada por la tala excesiva, la contaminación del agua por fuentes agrícolas y problemas de disponibilidad de agua a causa de los efectos del cambio climático. Desde 2005, WWF ha trabajado con comunidades como la de San Miguel Suchixtepec para vigilar, salvaguardar y restaurar el territorio mediante la reforestación, la capacitación para desarrollar una mejor agricultura y prácticas sostenibles de gestión del agua mediante el reconocimiento de la cultura y las costumbres locales.

Con base en este trabajo, las lecciones y las relaciones con la comunidad de estos últimos 16 años, IKEA Social Entrepreneurship y WWF-México, en conjunto con Nature Pays, una iniciativa de WWF que trabaja con emprendimientos sociales sostenibles, iniciaron en 2020 una alianza para fortalecer las operaciones y el acceso potencial a los mercados de 13 empresas comunitarias de conservación (ECC), cuyo trabajo y productos ayudan a la conservación de la CZH. Formadas por personas de comunidades que viven en el paisaje, incluyendo San Miguel Suchixtepec, estas ECC se inspiran en generaciones de conocimientos y tradiciones zapotecas que promueven una relación más equilibrada entre las personas y la naturaleza.

Para reconocer y celebrar nuestra colaboración con ellos, nos reunimos con tres miembros de tres ECC diferentes – Fabiola de Nayé, Porfirio de Guitiani y Romeo de Alternativa Agrícola Suchixtepec (AAS) – para hablar de cómo la cultura y las tradiciones zapotecas dan forma a su relación con la naturaleza y les permiten crear medios de vida sostenibles para su futuro y sus comunidades.



 
Fabiola Ramos Hernández
Fabiola Ramos Hernández, Nayé: Jabones y ungüentos medicinales elaborados con especies autóctonas de plantas y flores. 




Romeo Salinas Ramírez
Romeo Salinas Ramírez, Alternativa Agrícola Suchixtepec: Granja ecológica de verduras, frutas y conejos.




Porfirio Hernández Hernández
Porfirio Hernández Hernández, Guitiani: Granja ecológica de diversas frutas para la producción de fruta embotellada.


 

COSMOVISIÓN DE LA NATURALEZA

 
"Dependemos de la naturaleza, no al revés. Tenemos que cuidarla; la naturaleza es un tesoro para nosotros y las generaciones futuras”.  Fabiola 
Rodeado de árboles de hoja perenne y manantiales de agua burbujeante, San Miguel Suchixtepec se encuentra rodeado por una naturaleza siempre presente. Porfirio, Fabiola y Romeo ven a la naturaleza no como una mercancía o algo para usar y tirar, sino como una parte de sus vidas. Sin ella, dice Porfirio, no podríamos existir. Esta cosmovisión de la vida que les rodea determina su forma de relacionarse y trabajar con la tierra que labran, el agua que beben y los cultivos que realizan.
 
"Es una alegría vivir aquí en esta comunidad, en este bosque; somos gente del bosque (...) ¿Por qué buscar agua y comida en otros planetas? Aquí lo tenemos todo. Tenemos que proteger la vida aquí y no trabajar contra la naturaleza, sino con ella. Decimos no a la sobreexplotación porque, al destruir la naturaleza, nos destruimos a nosotros mismos". Romeo  
"La naturaleza significa vida, sin ella no existiríamos (...) Te da comida, agua, ropa, todo. Si la naturaleza no existiera, ninguna cantidad dinero del mundo te ayudaría. Por eso pienso en cómo transmitir este sentimiento a otras generaciones, al futuro". Porfirio


 

PROTECTORES DE LA TRADICIÓN ZAPOTECA Y DE LA NATURALEZA

 
"La protección de la naturaleza proviene de nuestros antepasados; viene de la gente de la que tuvimos la suerte de aprender; de cómo cuidaban la tierra, los animales y las flores. (...) Si olvidamos de dónde venimos, no podemos dar a la naturaleza el lugar y el valor que le corresponde". Porfirio
La granja agroforestal de Romeo incluye perales, manzanos, aguacates y melocotoneros cultivados junto con tallos de maíz en laderas empinadas de tierra roja. Los procesos de la granja incluyen fertilizantes orgánicos hechos por él mismo y buscan reducir la erosión de la tierra intercalando los árboles frutales con el maíz de cultivo común. Alrededor de su granja, sobresaliendo aquí y allá, hay carteles en lengua zapoteca que explican el trabajo que realiza AAS. Los productos de Naye, elaborados con especies autóctonas de plantas medicinales, llevan en sí el legado del abuelo de Fabiola y su don para curar dolencias con productos naturales, famoso en San Miguel. Al igual que su abuelo, Fabiola bendice el tomillo, el romero y las demás plantas del vivero de Naye antes y después de usarlas para elaborar productos. La visión de Porfirio de Guitiani, una finca con diferentes árboles frutales cultivados con métodos similares a los de Romeo, proviene de las enseñanzas que le transmitió su padre. 
 
"No se puede separar la lengua zapoteca de la agroecología, van de la mano (...) Usamos letreros en zapoteco para que la gente de la comunidad pueda ver lo que hacemos en nuestra lengua materna. No queremos que el zapoteco desaparezca. (...) Algunas prácticas agrícolas tienen que ser transmitidas en zapoteco, no hay otra manera; si le pides a un anciano que lo explique en español, no es posible". Romeo
"Cuando empezamos con Nayé, la gente de la comunidad se alegró que continuáramos el trabajo de mi abuelo. Conocen los ungüentos y jabones que hacemos porque los hacía mi abuelo. (...) Conservamos las plantas autóctonas y hacemos lo que siempre hicieron nuestros antepasados: descubrir cómo pueden ayudarnos. Me encantaría que mis hijos aprendieran y llevaran estos conocimientos al futuro para que puedan hacerlo cuando ya no estemos aquí".  Fabiola 
 

EMPRESA COMUNITARIA DE CONSERVACIÓN (ECC)


En conjunto con otras 10 empresas sociales de diferentes partes de la CZH, AAS, Guitiani y Nayé esperan convertirse en ECC plenamente operativas: empresas que proporcionan medios de vida dignos y sostenibles que preservan los ecosistemas del paisaje. Además de tener negocios exitosos y respetuosos con el medio ambiente, los miembros esperan desarrollar sus productos y superar los retos en sus propios términos: fieles a las tradiciones culturales y familiares en las que están basadas. 
 
"La competencia es nuestro mayor reto. Hay empresas con mejores presentaciones y marketing, pero nos dicen que a la gente le gusta nuestra historia. Es decir, cómo llegamos a donde estamos. Y entre nosotras decimos que tenemos que creer en nuestro producto, creer en su eficacia y esperar que la gente también lo haga". Fabiola  
"Luchamos por ser completamente independientes y fabricar nuestros propios fertilizantes y pesticidas orgánicos, y aumentar nuestra productividad mediante la agroecología. (...) Estamos trabajando en ello, creando ideas y aprendiendo a aplicar la ciencia en nuestros procesos". Romeo 
"Necesitamos encontrar un mercado estable y comprometido con nuestro producto. A veces no trabajamos al 100% en nuestros terrenos porque sabemos que tendremos mucho producto, pero nadie a quien vendérselo". Porfirio 

En junio de 2020, IKEA Social Entrepreneurship y WWF, iniciaron una colaboración para fortalecer los productos y mejorar el acceso potencial a los mercados de 13 ECC. El proyecto espera crear medios de vida sostenibles para las comunidades rurales mientras se apoyan prácticas productivas en armonía con la naturaleza. Para lograrlo, la colaboración de tres años lleva a cabo talleres sobre adaptación al cambio climático, mejores prácticas agrícolas y de gestión integrada del agua y desarrollo organizativo y empresarial.

Los talleres agrícolas están sustentados en la agroecología, un modelo que pretende conservar el agua y el suelo mediante métodos de producción orgánica como la aplicación de biofertilizantes y pesticidas naturales. En cultivos como el aguacate, estas prácticas han reducido el consumo de agua y los costes de producción en un 64% y un 59%. Al mismo tiempo, los talleres de desarrollo empresarial esperan fortalecer las capacidades de las ECC para acceder tanto a los mercados locales como a los nacionales.

Este modelo de desarrollo de sustento podría ayudar a crear empresas sociales sostenibles que ayuden a preservar la biodiversidad de la CZH y las culturas locales. A través del Consejo Oaxaqueño de Agroecología, este modelo, y su impacto en los medios de vida del ECC, podría llevarse a otras regiones y paisajes del estado. El proyecto espera replicar este tipo de modelo en otros seis municipios del paisaje.      
 
"Somos 13 miembros en AAS, los talleres han ayudado a visualizar un sueño en singular, porque cada miembro tiene diferentes visiones para AAS. Nos ayudan a crear un sueño colectivo al ayudarnos a unir ideas, objetivos y aspiraciones. Esto es bueno, porque nos ayuda a creer en AAS y quizás evita que los miembros emigren y busquen trabajo en otros lugares. Esto ocurre aquí mucho. Los otros talleres nos enseñaron a mejorar nuestros agro insumos: como hacer mejores abonos, compostas y pesticidas. Todo esto mejora a AAS". Romeo 
"Durante el taller, nos pidieron hacer un dibujo de cómo vemos a Nayé en el futuro, y se nos ocurrió un dibujo en el que la gente de la comunidad ayudaba a cultivar las plantas que usamos para nuestros productos. El ejercicio nos ayudó a visualizar el valor de Nayé, su futuro y cómo llegar a él; cómo planificar mejor y cómo interactuar con los demás." Fabiola 
 

EL CAMINO POR DELANTE


A pesar de no estar libre de obstáculos, el camino de estos tres emprendedores sociales está marcado y pavimentado por las generaciones que ya lo recorrieron. Comprometidos con sus visiones, Nayé, Guitiani y AAS se basan en el trabajo que hicieron sus abuelos y padres y buscan la forma de sacarlo adelante. Y aunque a primera vista parece que son los pinos, los ríos caudalosos y los cerros los que unen las cuencas de Copalita-Zimatán-Huatulco, una mirada más cercana revela que entrelazados con esta naturaleza, se encuentran las creencias y el compromiso de personas como Fabiola, Porfirio y Romeo que hacen su parte para mantener viva la naturaleza para las generaciones de guardianes del bosque de mañana.

 
Fabiola Ramos Hernández
Fabiola le enseña a su hijo sobre el olor y textura de las plantas. Le explica que las plantas sienten, están vivas y que si las tratas bien, ellas estarán agradecidas y te lo mostrarán a través de sus propiedades. 

 
Foto: mano seleccionando maíz desgranado.
Emprendimientos sociales sostenibles: los ejemplos de Porfirio, Fabiola y Romeo.
© WWF